
Lo que suelo hacer inmediatamente es enviar un aviso privado a la persona (por Twitter o por correo electrónico por ejemplo) diciendo que he recibido un mensaje extraño de su cuenta y le recomiendo que en primer lugar cambie su contraseña de Twitter por una que sea robusta (que contenga letras mayúsculas, minúsculas, números e incluso otros caracteres como #, $, etc.) y que además revise las aplicaciones autorizadas en su cuenta de Twitter (el apartado se encuentra en este enlace) quitando el permiso a todas aquellas que no sean imprescindibles.
Solo así se consigue evitar revocar el acceso para que se sigan mandando esos mensajes indeseados que además dañan un poco nuestra imagen en las redes sociales. Si además está causado porque han conseguido iniciar sesión averiguando una contraseña fácil, podría darse el caso de que secuestren la cuenta e incluso perdamos definitivamente su control, tirando por la borda probablemente horas y horas de trabajo.
1 Responses to Cuidado con los mensajes directos (DMs) raros en Twitter