Los móviles, y, en concreto, los smartphones o teléfonos avanzados son cada vez más populares a pesar de su elevado precio.
Hasta hace unos meses, los principales operadores en España subvencionaban la adquisición de los terminales con la particularidad que las ofertas realizadas eran más o menos personalizadas, lo que generaba un auténtico regateo de precios cuando finalizaba el contrato de permanencia para renovar.
¿Quién podría pensar hace apenas 4 años (una eternidad en lo que a innovación tecnológica se refiere) que hoy los operadores de telecomunicaciones incluirían en el precio de sus conexiones a Internet llamadas a fijos con una tarifa plana? Pues sí, es cierto. Hoy podemos hablar el tiempo que nos apetezca con nuestro primo de Mérida o nuestra novia de Zaragoza sin que por ello engorde la factura telefónica. Progresivamente incluyen también ofertas de llamadas a móviles y sólo el futuro dirá cómo termina esta guerra de precios y servicios.